martes, 3 de diciembre de 2013

Método de prevención

Programas para la familia
Los programas de prevención para las familias deben mejorar la compenetración y las relaciones familiares e incluir habilidades para ser mejores padres; entrenamiento para desarrollar, discutir y reforzar la política de la familia con relación al abuso de sustancias; y la información y educación sobre las drogas.2
La compenetración familiar constituye el cimiento de la relación entre los padres y los hijos. Se puede fortalecer esta compenetración a través de un entrenamiento para mejorar la capacidad de apoyo de los padres a los hijos, la comunicación entre padres e hijos, y la participación de los padres con los hijos.17
• El monitoreo y la supervisión de los padres son esenciales para prevenir el abuso de las drogas. Se pueden mejorar estas habilidades con entrenamiento de cómo establecer reglas; técnicas para el monitoreo de actividades; el elogio por conducta apropiada; y la disciplina moderada y consistente que hace respetar las reglas de la familia anteriormente definidas.18
• La educación y la información sobre las drogas para los padres o los cuidadores refuerza lo que los niños están aprendiendo sobre los efectos dañinos de las drogas y brinda la oportunidad para la discusión familiar sobre el abuso de sustancias legales e ilegales.4
• Las intervenciones cortas enfocadas en la familia y dirigidas a la población en general pueden cambiar positivamente conductas específicas de los padres que pueden reducir los riesgos futuros para el abuso de drogas.27
Programas en la escuela
Se pueden diseñar los programas de prevención para una intervención tan temprana como en los años preescolares que enfoquen a los factores de riesgo para el abuso de drogas tales como el comportamiento agresivo, conducta social negativa, y dificultades académicas.30, 31
Los programas de prevención para los niños de la primaria deben ser dirigidos al mejoramiento del aprendizaje académico.
http://www.drugabuse.gov/sites/default/files/redbook_spanish.pdf

efectos de la drogas en el sistema nervioso

Efectos

Los efectos de las drogas son múltiples y complejos. En ocasiones, dependen de factores como la pureza, la vía de administración, la dosis consumida, la frecuencia y las circunstancias que acompañan al consumo (entorno, lugar, mezcla con otras sustancias). Las drogas actúan sobre el sistema nervioso central produciendo un efecto depresor, estimulante o perturbador. Las sustancias depresoras disminuyen o inhiben los mecanismos de funcionamiento normal del sistema nervioso central provocando relajación, sedación, somnolencia, hipnosis e incluso coma.
Los estimulantes producen sensación de fatiga y alteraciones del apetito o del sueño. Un tercer grupo de sustancias, llamadas alucinógenas o perturbadoras, alteran la percepción de la realidad, el estado de conciencia y provocan alucinaciones. Algunas sustancias producen más de un efecto, como las drogas de síntesis, que causan estimulación y perturbación del sistema nervioso central. Las alteraciones psicológicas van desde cambios en el estado de ánimo a crisis de ansiedad, crisis de pánico, delirios, alucinaciones e incluso trastornos psicóticos. Las drogas pueden afectar también a otros órganos como el hígado, los pulmones, los riñones, el páncreas o el corazón.

Abuso

El uso de drogas provoca, en la mayoría de los casos, fenómenos de tolerancia y adicción. A medida que el organismo se adapta a la presencia habitual de una sustancia se puede producir el fenómeno de la tolerancia, es decir, la necesidad de consumir dosis cada vez mayores y con más frecuencia para conseguir los mismos efectos. El empleo repetido de una droga puede crear adicción, es decir, la necesidad compulsiva de consumir esa droga regularmente sin que sea posible moderar su consumo o suprimirlo. La mayoría de las drogas producen dependencia física y psicológica.
Cuando una persona necesita consumir una droga para conseguir un estado afectivo agradable o evitar un estado desagradable, tiene una dependencia psicológica de esa sustancia. Muchas veces, esa dependencia es muy fuerte y difícil de superar. El uso regular de una sustancia química produce, en muchos casos, alteraciones fisiológicas en el organismo que originan una dependencia física de esa sustancia. El organismo se ‘acostumbra’ a la presencia de la droga y la ‘necesita’ para funcionar con normalidad. Si la droga se suprime o se reduce, el organismo responde con un conjunto de síntomas físicos y psíquicos que reciben el nombre de síndrome de abstinencia. El síndrome de abstinencia depende de cada droga y, a veces, se controla con medidas terapéuticas sintomáticas o sustitutivas (sustancias menos nocivas, de efectos parecidos, que se retiran progresivamente).

Tipos

Causas del consumo de las Drogas

CAUSAS DEL CONSUMO

    Las personas que consumen las distintas  sustancias parecen hacerlo por una diversidad de razones, unas veces expresadas, otras inconscientes.

LAS CAUSAS MÁS COMUNES SON:


[              Satisfacer la curiosidad sobre los efectos de determinados productos.

[              Presión de los pares: pertenecer a un grupo o ser aceptados por otros.

[              Tener experiencias nuevas, placenteras, emocionales o peligrosas.

[              Expresar independencia y a veces hostilidad.

[              Personalidad mal integrada. Desajuste emocionales, intelectuales, y sociales.

[              Descontento de su calidad de vida, ausencia de proyecto de vida.

[              Carencia de autoestima.

[              Falta de información acerca de los peligros del uso indebido de drogas.

[ Ambiente desfavorable, crisis familiares y fácil acceso, a menudo, a sustancias que producen. Dependencia.

[              Escapar del dolor, la tensión o la frustración.

Se debe advertir que todos estos motivos no se hallan necesariamente asociados a una patología individual ni a circunstancias sociales adversas.
Los importantes factores señalados, reforzados por  los efectos farmacológicos y de otra índole que producen las drogas causantes de dependencia, pueden hacer a estos productos atractivos para algunos jóvenes que los experimenten.
Las posibles propiedades farmacodinámicas de las drogas pueden ser, según la droga empleada:

v    Alivio del dolor  de la ansiedad.

 
v    Disminución de las inhibiciones.

v    Sensación de bienestar.

v    Relajación y embotamiento de la conciencia.

      v     Sensación de alivio  de la fatiga.

v    Producción de estados eufóricos, etc. 


Anectotas acerca de las Drogas

En la sala de emergencias de un hospital, un médico se inclina sobre un niño inconsciente, cuya respiración es rápida y superficial, si bien su pulso es violento. Sus padres sólo saben que se tragó "unas píldoras". Se le hace un lavado de estómago y se ordena una prueba sanguínea, que confirma lo que se sospechaba: que sufre salicilismo agudo, debido a que tomó aspirinas, una de las drogas más útiles de la Ciencia, que es también una de las principales causas del envenenamiento en los niños.
                En la espesura de la selva amazónica, un cazador jíbaro carga en silencio su cerbatana con un dardo cuya afilada punta está cubierta con una resina pardusca. Apunta el largo tubo de 5 metros a un mono que se encuentra a 10 metros: con un leve soplido envía su pequeño proyectil. El mono salta al recibir el dardo, parlotea un momento, se tambalea y cae. En menos de 5 minutos deja de respirar. La resina pardusca que mató al mono es el curare, una de las sustancias naturales más tóxicas; purificada es un valioso auxiliar de la cirugía: inyectando en dosis minúsculas, relaja los músculos del abdomen para que el cirujano pueda operar sin miedo de espasmos musculares.
                Estas dos anécdotas resumen lo que probablemente es el hecho más fundamental sobre las drogas: todas las drogas son venenos y todos los venenos son drogas. Por ello no es de extrañar que la palabra pharmakon, de la que se derivan palabras como "farmacia", "farmacopea", etc. significara originalmente tanto una bebida curativa como una mortal.
                En general, una droga es toda sustancia que pueda producir una alteración en la función o la estructura del tejido vivo. (Una bala que se incrusta en el cuerpo altera, incuestionablemente, su funcionamiento, pero su efecto es mecánico más que químico, por lo cual no puede clasificarse como una droga.) La palabra "drogas" implica sustancias medicinales, o sea aquellas que, administradas en dosis reguladas, producen cambios deseables en el cuerpo humano, contraatacando la enfermedad o aliviando el dolor. Gracias a algunos medicamentos, casi se han desterrado ciertas enfermedades y se han aliviado los efectos de otras. Se puede acelerar un corazón o frenar uno acelerado, subir o bajar la tensión sanguínea, regulas la secreción de los riñones y, en general, realizar docenas de tareas benéficas.
                Las drogas pueden alterar el funcionamiento del sistema nervioso: los anestésicos borran el dolor del bisturí del cirujano; los tranquilizantes calman las angustias de los neuróticos y psicóticos, aunque su acción no siempre es benéfica. El alcohol induce a la euforia y también al atontamiento comatoso; los narcóticos calman el dolor o producen hábito. Los alucinógenos, como el LSD, quizá ensanchen la conciencia, pero también deforman la mente hasta llevarla a la misma locura.
                Las cualidades contrapuestas de estas drogas del sistema nervioso central nos indican una verdad básica sobre todas las drogas: mal usadas, y a veces bien usadas, pueden convertirse en venenos, que producen reacciones perjudiciales que van desde nauseas hasta la muerte. Hasta las medicinas más benéficas tienen efectos adversos. Hay quien afirma que, en los Estados Unidos, el 5% de los pacientes de los hospitales sufren la reacción de alguna droga o medicina. Lo mejor que podemos decir de cualquier medicina es que sus buenos efectos compensan los malos, en la mayor parte de los enfermos y en la mayoría de las veces.
                Desde los primeros tiempos de su existencia, el hombre ha buscado medicinas que cumplan más funciones con mayor eficacia y seguridad. Esta búsqueda ha tenido lugar en los más extraños sitios: en las selvas sudamericanas, de donde es originario el curare; en los brebajes de los exorcistas y hechiceros especializados en el uso de hierbas, que nos han legado por lo menos veinte medicinas útiles, etc. Sin embargo, para el farmacólogo, el "problema de las drogas" es mucho más amplio que la simple búsqueda de medicinas nuevas y mejores, más amplio aún que los grandes dilemas médicos y sociales que nacen del abuso de ciertas drogas. A nuestro alrededor hay toda clase de sustancias que nos afectan químicamente y que penetran en nuestro organismo: los jabones, enjuagues, desodorantes y depilatorios del baño son drogas; también detergentes limpiadores y abrillantadores de la cocina, pinturas y disolventes con que pintamos nuestras casas. No hay ninguna sustancia en nuestro medio que, en ciertas circunstancias, no obren como droga. Hasta el agua destilada más pura, ingerida en grandes cantidades, puede robarle al organismo tanta sal que produzaca un estado semejante al agotamiento por calor. El exceso de agua, digamos tres o cuatro litros, produce en los niños la muerte por envenenamiento.
                Actualmente, las drogas no medicinales son mucho más numerosas, mucho menos inevitables y, en su mayor parte, mucho menos entendidas que las drogas medicinales. Sin embargo, una mejor comprensión de las drogas en el medio ambiente es tan capital para el hombre como lo es un buen conocimiento de las medicinas. Apenas comenzamos a entender la forma en que nuestro medio y las drogas que contiene pueden darnos la salud o la enfermedad y hacernos vigorosos o débiles. Sin un conocimiento más profundo de las drogas, la civilización corre el gran riesgo de envenenarse a sí misma con su ingente número de desechos industriales y químicos.

Historias de las Droga

Drogas: Historia de las Drogas en la Antiguedad
Historia y Antigüedad de las Drogas, sus origenes en la antigüedad, cuales fueron las primeras producciones, el por qué de las mismas, primeras personas con problemas de drogadicción y todo lo relacionado con la Historia y Antigüedad de las Drogas.

La experiencia de la droga es tan antigua como la humanidad. Parece ser que la adormidera ya se cultivaba en Europa en la Edad de Piedra, en Suiza se han encontrado fósiles de semilla de adormidera perteneciente al cuarto milenio antes de cristo.
Las propiedades embriagadoras del cáñamo de la India fueron utilizadas para algunas ceremonias religiosas.
En el año 600 los árabes propagaron las virtudes terapéuticas de la adormidera, revelando a los chinos la propiedad estupefaciente del opio.
El consumo de la droga se extendió rápidamente por toda China y se desarrolló el contrabando del opio a gran escala.
A principios del siglo XX aparecieron en occidente el opio y el hachís. Finalmente el consumo de drogas se ha extendido por todo el mundo, creando un grandísimo problema social. Con la cooperación de organismos como la ONU. Que en 1971 calculó que en todo el mundo había unos 120.000.000 de drogadictos.


Bebidas alcohólicas y benzodiacepinas

Existen dos tipos de receptores GABA, los de tipo a (GABAa) y tipo b (GABAb); los primeros son ionotrópicos, esto es, su modelo funcional se basa en la apertura de un canal iónico, mientras que los segundos se basan en mensajeros secundarios a su estimulación.
Las bebidas alcohólicas contienen etanol. El receptor GABAa es un complejo oligomérico con distintos sitios donde se unen correspondiente ciertas sustancias; se disponen alrededor de un poro o canal iónico que se abre selectivamente para el paso de los iones del exterior al interior de la célula y de ese modo modificar el potencial de acción hiperpolarizando la célula. El canal se abre cuando un ligando se une a un sitio.
File:Peripheral GABA(B) receptor targets.pngCuando la molécula de etanol se une al sitio correspondiente, el canal iónico se abre permitiendo el paso de los iones de cloro al interior. El número de estos durante el reposo es mayor en el exterior que en el interior, esto induce a que el potencial de la neurona sea de –75 mV. Cuando los iones de cloro pasan al interior, este potencial se revierte, incrementando el número de iones dentro de la neurona e hiperpolarizándola. La hiperpolarización impide que la señal eléctrica presináptica se convierta en postsináptica por lo que el etanol ejerce un efecto inhibidor de la señal eléctrica.
Además, de la inhibición de la señal, el etanol inhibe además la producción de monoamino oxidasa por lo que ralentiza la oxidación de ladopamina a nivel postsináptico y esto aumenta la sensación de placer natural.9 Cuando el etanol deja de hacer efecto por la metabolización hepática, el placer disminuye porque la MAO comienza a oxidar la dopamina, y el usuario tiende a buscar consumir más etanol para mantener el mismo efecto placentero, lo que convierte al etanol en una sustancia extremadamente adictiva.
Las benzodiacepinas se unen al sitio benzodiacepinico del receptor GABAa. Al unirse, el GABA se libera y se une al receptor, abriendo el canal iónico y ejerciendo un efecto sedante e hipnótico similar al etanol. El mecanismo no es agonista ya que, al igual que el etanol, abre el canal mediante una molécula secundaria; entonces es considerado igualmente un modulador alostérico positivo.
El etanol es extremadamente peligroso ya que en su metabolización hepática se produce el metabolito acetaldehído, 20 veces más tóxico que el etanol y un posible carcinógeno.10 Las benzodiacepinas ejercen el mismo efecto sedante-hipnótico que el etanol por lo que son utilizadas comúnmente para tratar el alcoholismo11 y la ansiedad.

¿Que son las Drogas?




Una droga es todo fármaco o principio activo de un medicamento, elemento de origen biológico natural o producto obtenido de él por diversos métodos, o sustancia producida artificialmente, que produce efectos en el sistema nervioso central modificando el estado de ánimo o produciendo placer, y que puede tener potencial de abuso.1
Este término también se utiliza, especialmente en el ámbito de la medicina y farmacología, como sinónimo de principio activo o fármaco, ya sea por extensión del concepto o debido a la traducción literal del término inglés drug, el cual no hace distinciones entre los tres términos. La definición original de la OMS refleja este uso genérico, sin embargo, la definición más específica indica que droga es el término más adecuado para referirse a sustancias que se usan sin fines terapéuticos; alteran aspectos afectivos, cognitivos y conductuales; pueden ser autoadministradas; y pueden inducir estados biológicos adaptativos en sus usuarios.2
Desde esta última perspectiva, el sinónimo más adecuado para esta definición de droga es sustancia psicoactiva.3